4.3. Documentación audiovisual en emisoras de televisión

Imma Rull

 

El objetivo de este documento es mostrar los cambios y los nuevos retos que los documentalistas de una emisora de televisión tienen que afrontar ante los nuevos formatos de producción y archivo. Y estudiar como la tecnología digital afectara la televisión.

 

En el mundo digital los parámetros de la imagen y del sonido se representan por números; en un sistema de base dos usando únicamente los dígitos "1" y "0". El proceso de digitalización de una señal analógica lo realiza el conversor analógico/digital. Esta representación, numérica en bits, permite someter la señal de televisión procesos muy complejos, sin degradación de calidad.

 

La televisión digital introduce multitud de innovaciones tecnológicas, muy interesantes para los tele-espectadores y también para los radio-difusores, los más relevantes son: el formato 16:9 ; la interactividad; el audio digital multicanal; la subtitulación en diversas lenguas; la alta definición; la televisión de pago y la 3 D.

 

La digitalización de las emisoras de televisión implica un cambio en los procesos de producción y archivo.

 

Para entender cómo la digitalización ha influido en toda la cadena de producción y de archivo del material audiovisual, es necesario conocer el proceso de la documentación en la televisión analógica. Los principales elementos en la documentación audiovisual han sido:

 

La cinta. Hasta ahora todas las televisiones han utilizado el soporte cinta en la producción, flujo documental y archivo definitivo. La cinta ha conllevado la restricción de accesibilidad de más de un usuario. Este mismo soporte exige un gran control de préstamo para evitar la pérdida y saber en todo momento su exacta ubicación.

 

El archivo o almacén de cintas. El archivo de cintas se ha considerado como una entidad física, hermética y con complejas infraestructuras de espacio y mantenimiento. Estos factores han alejado al archivo de todo el proceso de producción en televisión. La conservación y preservación del patrimonio audiovisual siempre ha sido de los principales objetivos del archivo y de los documentalistas de televisión.

 

Gestión de la Documentación. Las bases de datos referenciales, han sido las herramientas que los documentalistas han utilizado para el análisis, búsqueda y recuperación de la información. Raramente estas bases de datos estaban conectadas al resto de aplicaciones corporativas.

 

En la producción digital, la cinta de video da paso a los formatos digitales. El archivo o almacén de cintas al robot digita. Y la gestión de la documentación pasa por un DAM, un gestor de contenedores digitales.

 

Además en el proceso de producción de los programas de televisión se genera un gran volumen de materiales, que también podrían ser susceptibles de ser preservados.

 

Pero la preservación del material audiovisual digital tiene unas claras limitaciones económicas, porque tiene unos costes importantes en soportes (memoria informática), robot de almacenaje acondicionado y tareas de gestión documental. La política de selección puede responder a un valor económico o a un valor patrimonial. Los objetivos de los archivos de las empresas productoras o emisoras de televisión son distintos de los de un archivo público o académico.

 

La gestión de los archivos de televisión es el principal tema de análisis y debate en los organismos y conferencias sobre archivos de televisión. Así la Federación Internacional de Archivos de Televisión (FIAT/IFTA) ha centrado sus últimas conferencias en la digitalización. La UER (Unión Europea de Televisión), que hasta ahora se había demostrado muy poco interés en los archivos, ha publicado un informe 'Los archivos de la televisión digital' (2003), exhortando a las empresas de televisión a digitalizar sus archivos históricos y a incorporar la gestión del archivo en la propia cadena de producción.

 

La organización FIAT/IFTA ha publicado unas recomendaciones para establecer políticas de selección en los archivos de televisión:

 

a) Una primera distinción entre el material emitido de los materiales utilizados previos a la emisión:

 

Se considera material emitido "transmited material" el material tal y como ha sido emitido y percibido por la audiencia. Este material tiene un doble valor, por una parte valor económico pues permite la reemisión y su comercialización, y por otra parte valor cultural, puesto que es el material transmitido a la audiencia.

 

El material no-emitido "not transmited material" incluye todo el material previo a la producción del programa final: originales de cámara, noticias de agencias nacionales y internacionales, copias previas, etc. Este material tiene un valor básicamente económico, ya que las imágenes pueden ser reutilizadas en nuevas producciones.

 

b) En función de los contenidos y los derechos de explotación del archivo, se puede distinguir dos tipos de material:

 

Material de producción propia, es un material de preservación prioritaria.

 

Material adquirido, es el adquirido a terceros. El archivo no posee los derechos de explotación y, podría ser un criterio para no preservarlo. Pero hay otros factores que pueden aconsejar su preservación, como pueden ser el doblaje a una lengua o la subtitulación por el coste que éstos representan.

 

c) Los programas de los géneros de ficción y documentales, deben ser conservados en su integridad a largo plazo.

 

d) Los programas repetitivos y con poco interés de reemisión (concursos, magazines, tertulias, programas infantiles…), son candidatos a una preservación a largo plazo selectiva, en forma de muestreo, preservando solo algunas emisiones significativas y suficientemente representativas de la serie.

 

La forma habitual de preservar los programas emitidos es conservar en el archivo la copia de emisión, es decir la copia en alta calidad, que en el sistema digital se guarda en el robot con el formato definido (DVCPro 25 Mbps o DVCPro 50Mbps son los más habituales) Si se trata de un programa realizado en directo, para poder preservarlo es necesario realizar en el momento de la emisión, una copia de archivo (asset digital) de suficiente calidad y prever los medios y instrumentos necesarios para que esta material sea documentado y preservado a largo plazo.

 

El objetivo del archivo audiovisual no es preservar los soportes, sino su contenido, las imágenes y sonidos, por tanto una vez copiado el contenido a un nuevo soporte o digitalizado con suficiente calidad, el soporte original puede ser descartado.

 

Los elementos que permiten asegurar la preservación son: la utilización como formato de archivo del mejor estándar técnico posible y soportes de calidad ; la preservación del soporte en unas condiciones de almacenamiento seguras y favorables, controlando las condiciones ambientales; la restauración y/o transfers periódicos a formatos actuales antes que el original o la primera copia hayan dejado de ser tecnológicamente soportables; y la conservación de al menos un máster y una copia, almacenados en espacios separados físicamente.

 

Pero la responsabilidad de la preservación de la producción y las emisiones de radio y televisión no debiera depender solamente de las propias emisoras. Deberían ser preservadas en archivos públicos y recogidas porl Depósito Legal, como parte del patrimonio cultural de cada país.

 

En el contexto europeo, el INA francés (Institut National de l'Audiovisuel) es un buen ejemplo de un organismo público que tiene como misión la preservación de las emisiones de las radios y televisiones francesas. La nueva ley del Depósito Legal, aprobada en Francia en 1992, ha sido una de las pioneras en crear la obligatoriedad del Depósito Legal para las emisiones de radio y televisión.

 

En EEUU la Biblioteca Nacional, Library of Congress, que también ha iniciado un macro proyecto de digitalización, mantiene una amplia colección de programas y informativos de televisión. Otro importante archivo público de televisión es la colección de informativos de televisión de la Universidad de Vanderbilt .

 

En el contexto de la legislación española no hay ninguna norma sobre la preservación a largo plazo de las emisiones de radio y televisión, ni ningún organismo público, más allá de las propias empresas de televisión, con esta misión. La única norma legal al respecto es la que obliga a las emisoras a conservar, durante seis meses, una copia de las emisiones, para poder resolver cualquier reclamación legal.

 

El acceso multiusuario y simultáneo a los recursos audiovisuales, ha sido un reto para los servicios de documentación de los medios audiovisuales, ya que han de responder a una tipología muy variada de demandas. Los usuarios han de recuperar los documentos, no sólo por su título, autor o fecha, sino también por los temas o por las imágenes concretas que aparecen en el documento, y en el mínimo tiempo posible.

 

Los elementos básicos de identificación y representación de los documentos audiovisuales conservados en los archivos de televisión pueden agruparse en cuatro tipos: a) datos de identificación; b) descripción técnica; c) descripción del contenido; d) datos relativos a las condiciones de uso (copyright, derechos de explotación).

 

Los datos de identificación y la descripción técnica, son datos ya disponibles desde la creación, ingesta o producción del documento, antes de su entrada en el archivo. Para ello es fundamental que la base de datos o el DAM que gestiona el archivo estén relacionados con las bases de datos o DAM'S de producción y emisión, de forma que la información, los metadatos, fluyan fácilmente de un entorno a otro.

 

Cada documento requerirá un nivel de análisis en relación a su explotación posterior.

 

Los informativos diarios de las cadenas de televisión o programas que contengan diversos reportajes, habrá que analizar como unidad independiente cada una de las noticias o reportajes, como se haría con los artículos de un periódico o revista.

 

Los documentos audiovisuales han de ser analizados en un segundo nivel que describa las imágenes concretas que contiene, que no siempre pueden estar directamente relacionadas con el tema global del documento.

 

Para poder describir las imágenes es necesario un visionado o minutado del documento completo, donde el documentalista a partir de la "lectura" de las imágenes crea una descripción textual, traduciendo en palabras el contenido visual y sonoro. Además, es necesario fechar y localizar las imágenes y identificar todos los elementos (paisajes, edificios, personas, jugadas deportivas...) para lo que es necesario poseer unos referentes culturales adecuados. El nivel de detalle de la descripción está en función del tipo de documento y del tipo de búsquedas que se puedan establecer.

 

Una descripción media tiene que incluir: la descripción de las secuencias más relevantes; los nombres de los personajes; la identificación de lugares, edificios...; y la descripción de las acciones que se desarrollan.

 

Las imágenes deben incluir su descripción formal, es decir, el tipo de plano (primer plano, plano medio, plano general,...) así como los movimientos de cámara (panorámico, traveling, zoom..), y indicar la localización del plano o secuencia en el documento (código de tiempo o Time Code TC).

 

Es necesario completar el análisis del documento utilizando descriptores o términos controlados según un Thesaurus o un lenguaje documental específico.

 

Los archivos de las televisiones, a pesar de su alto coste, aportan valor, puesto que son ampliamente usados, tanto para la reemisión de programas, como para la reutilización de fragmentos. Se calcula que los informativos de televisión contiene una media de un 30% de imágenes de archivo.